Hermoso jardín
Desayuno delicioso
Atención excepcional

Falta de armario
Poca ventilación
Dificultad para acceso

Habitación amplia y cómoda.

recomiendo este hotel, es total for una estancia de dos días

amplia habitación, amable atención, disfrutamos de un delicioso desayuno en un ambiente agradable y tranquilo, además, la ubicación es conveniente, a solo 3 km del aeropuerto, lo que facilita los desplazamientos.

No

amplias vistas agradables pero falta espacio para guardar

La habitación era muy luminosa, con unas vistas preciosas al jardín. La atención del propietario fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa desde el primer momento.

Sin embargo, eché de menos un armario adecuado para organizar mi ropa, ya que el espacio de almacenamiento era limitado.

El lugar tiene un jardín encantador y un ambiente tranquilo que favorece la relajación. Sin embargo, echamos de menos un espacio adecuado para almacenar la ropa en la habitación, ya que no había armario ni cajones suficientes.

La habitación era amplia y cómoda, con un bonito jardín, perfecto para relajarse. Además, tiene una terraza ideal para disfrutar de la tranquilidad.

estuve muy bien, no he tenido ningún inconveniente

La habitación era luminosa, con vistas al jardín. El dueño, Stephane, muy atento. Ideal para ciclistas con rutas cercanas. Sin embargo, faltaba espacio para guardar la ropa en la habitación.

Un jardín de ensueño y atención impecable

Nos quedamos en una habitación muy luminosa, con vistas al jardín que era hermoso. El dueño, Stephane, fue súper atento y nos hizo sentir como en casa. La cena en el bar fue genial, algo para recordar. Aunque el baño tenía todo, un espacio adicional para nuestras cosas hubiera sido ideal.

Habitación cómoda y amplia, el jardín es un verdadero encanto. Fácil acceso a la ciudad. Perfecto para relajarse con toda la familia.

El desayuno era más soso que una conversación con mi vecino.

La habitación era muy amplia y cómoda, con unas vistas increíbles al jardín y a la Catedral de Beauvais. La cama era enorme y súper cómoda. Tenía un baño bien equipado con ducha y bañera. La decoración era agradable y el ambiente era tranquilo, perfecto para relajarse. Pero, faltaba un poco de espacio para guardar ropa, como un armario o cajones.

Disfruté de una habitación luminosa con vistas al jardín. Tuve una atención excepcional por parte del propietario, quien me hizo sentir como en casa. La cercanía a rutas para ciclismo fue un plus para mis paseos. Además, la cena en el bar fue una experiencia memorable. Como chef local, aprecio un buen sabor y aquí lo encontré.

Eché de menos un espacio adecuado para guardar mi ropa. La comunicación fue complicada, ya que el personal no hablaba español ni inglés.